En el Salón Tattersall del Hipódromo de San Isidro, se celebró el ultimo viernes, la emocionante velada boxística donde la campeona supermosca OMB (Organización Mundial de Boxeo), Carolina Raquel “La Turca” Duer (9-3, 2Kos.), defendió exitosamente y por segunda vez su corona mundial, al destrozar en el primer asalto, a la aspirante al titulo y nacida en Serbia, Fleis Djendji (12-11-1, 6Kos.).
Después de varias confrontaciones de pugilismo femenino y luego de un atractivo show de tango, el lujoso pabellón de uno de los Hipódromos más grandes y bellos de América, recibió el duelo por el reinado supermosca, en el cual “La Turca” demostró que no deseaba brindarle a su rival la mínima posibilidad para arrebatarle su cinturón. Por esto, efectuando la mejor actuación de su carrera y sin tener piedad, la porteña de 32 años aniquiló por nocaut técnico en el round inicial, a una endeble adversaria, que sin poder intentar nada, paso más tiempo arrodillada o caída en la lona, que en pelea.
El breve y contundente desempeño de Duer, evidenció claridad, precisión, potencia y gran concentración, para eliminar en un corto lapso, el escollo que le permitiría festejar la segunda defensa de su corona mundial.
“Desde que subí al ring, pude demostrar que hoy fui diferente, ya que esta es la boxeadora que soy. Aunque a veces es muy difícil poder demostrar en el ring todo lo que uno sabe, me quedo tranquila porque no tengo duda que hoy pude hacerlo. Trabaje bien, me cubrí, no me desesperé, cuando ella sintió mis manos, hice el paso atrás y volví a golpearla. La verdad, me salio todo bien…más contenta no puedo estar”, aseguró Carolina, que prosiguió hablando sobre su contrincante: “Ella no estaba sicológicamente preparada para ser campeona mundial. Con su entrenador estaban más preocupados por una competencia europea, donde ella iba a pelear, que pensar en como ganarme el titulo. Por estas cosas y porque me entrene muy fuerte para esta pelea, nunca dude que iba a ganar “.
La entrenada por Alberto Zacarías, que sorprendentemente manejo todos los preparativos y detalles para la realización del evento que protagonizó, comentó como fue su vinculo con el público que asistió a la reunión boxística: “La gente con su aliento y apoyo, me hizo sentir muy bien. Respaldo mi trabajo técnico y físico, y pudo ser parte importante de esto, que fue como mi fiesta de cumpleaños. Estoy más feliz que (Juan Román) Riquelme, ya que hoy tuve toda la confianza en el ring, porque no podía perder ni pasarla mal, porque estaba en mi fiesta de quince”.
Concluyendo con sus declaraciones y dejando un segundo los festejos, Carolina Duer se puso seria y dijo: “Se armo una mala costumbre de hacerle creer a todos, que el boxeador es algo triste, que sube al ring a sufrir y solo piensa en sacrificarse. El boxeo es un gran deporte y puede ser muy divertido como lo son otros deportes. No tengo idea porque lo volvieron tan triste, tan gris… por eso quiero desde mi humilde lugar, tratar de traerle diversión, fiesta, de ver a los boxeadores subiendo al ring felices, todo lo contrario de lo que le paso a mi rival hoy, que subió triste, angustiada y de una manera que es imposible ganar una pelea. Así que a seguir festejando, disfrutando y los invito a todos, a que vengan a cortar la torta de mi fiesta de quince”.
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