Derrotadas, pero con la FRENTE EN ALTO

"La nena" Portillo y "La itaka" Matthysse

Con el bolso repleto de ilusiones, buscando seguir con el progreso en su carrera deportiva y con todas las ganas de lograr una gran presentación a nivel internacional, viajaron a México las argentinas Soledad Edith Matthysse (9-3-1, 1KO) y Marisa Johanna Portillo (10-5-2, 2Kos), para enfrentar el sábado 8 de octubre, a las talentosas monarcas mundiales Jackie “La Princesa Azteca” Nava (25-4-3, 11Kos) y Ana Maria “La Guerrera” Torres (27-3-3, 15Kos), respectivamente.

A pesar que el resultado final no fue favorable para las representantes albicelestes, el esfuerzo en la preparación, la humildad para afrontar el desafió y el tremendo despliegue dejado en el ring, ante deportistas del primer escalafón mundial, vale ser destacado y reconocido.

Matthysse ataca a Nava

El duelo de “La itaka”, como la apodan a Matthysse, se llevo a cabo en el Auditorio Fausto Gutiérrez Moreno de la ciudad de Tijuana, donde se enfrentó y cayó por puntos (fallo unánime) en diez asaltos, ante Jackie Nava, campeona interina supergallo del CMB (Consejo Mundial de Boxeo), quien no expuso su corona.

Aunque la confrontación fue íntegramente dominada por la pugilista local, la santafesina radicada en Chubut nunca dio el brazo a torcer, demostrando concentración, orden y dejando el alma en cada cruce, para soportar los ataques de una poderosa rival, que gano con claridad, pero no lo efectuó fácilmente.

Portillo avanza ante la mirada de "La guerrera"

Por el lado de la rosarina Portillo, quien tenia la difícil tarea de enfrentar a la legendaria reina supermosca del CMB, Ana Maria Torres, la situación fue bastante similar a la de su compatriota, debido que a pesar de entregar el corazón en cada round, siendo veloz y muy movediza, no pudo contrarrestar la notable calidad boxística de su rival, que en el Gimnasio Cabo San Lucas de Baja California Sur, triunfó por puntos (fallo unánime), en diez lapsos y realizó la histórica décima defensa de su cinturón mundial.

Es obvio el reconocimiento para ambas Boxeadoras Argentinas, que partieron con el bolso repleto de ilusiones y a pesar de ser derrotadas, regresaran a nuestro país con la frente en alto y un tremendo orgullo y aprendizaje en el bolso, que les va a dar más fuerzas, para seguir luchando y demostrar que tienen mucho más para dar.